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22 jul 2011

DICCIONARIO DEL ARMA DE CABALLERÍA II


El Diccionario que hemos redactado y que quisiéramos fuese bastante digno de la ilustrada clase a que se dedica, de lo que desconfiamos a pesar de nuestros esfuerzos y de nuestros desvelos, es sin duda el único en su género que contiene con más extensión todas las voces técnicas que más se usan en el picadero; como también una extensa explicación acerca del sistema que haya de seguirse para la doma, enseñanza y manejo de los caballos, según reglas del arte de la equitación.

A
Marcelino Rojo





ABIERTO DE ADELANTE. Llámase así al caballo que pisa claro o abierto con las manos, y no se cruza ni tapa para andar.

ABIERTO DE ATRÁS. Es el caballo que pisa claro y abierto con los pies, y no se cierra o cubre con ellos al andar.






ABIERTO DE PECHOS. Dícese del cabalo que está relajado de esas partes, lo que le imposibilita para la fatiga.
ABIERTO O DESPARRAMADO DE PIERNAS. Llámase así al caballo cuyas piernas desde su nacimiento se inclinan hacia afuera, perdiendo la perpendicular de su aplomo. Los caballos que tienen este defecto, aun cuando tengan solidez en sus remos en estado de quietud, al andar, el movimiento es penoso y
vacilante de una y otra parte.  
                                          Herraje en el Escuadrón de la Guardia Civil.
                                                            
 ABOCINADO. Dícese del caballo que no está derribado de atrás ni suspendido de alante y del que lleva la cabeza baja y pesada a la mano de la brida.
ABOCINAR EL CABALLO. Llámase así al que tropieza y c ae con frecuencia por debilidad o por otras circunstancias.
ABOCINARSE EL CABALLO. Es cuando al marchar carga todo el peso de su cuerpo sobre los brazos.
ABRAZAR AL CABALLO. Arrimarle al vientre las partes planas de las pantorrillas para ayudarlo a sostenerse con ellas en los aires.
 ABRAZAR LA VUELTA. Llámase así cuando el caballo forma grandes trancos, trabajando sobre ella, a fin  de ejecutarla completamente y con toda libertad.
ABRAZAR O SEÑALAR EL CAMINO. Dícese cuando el caballo señala con la mano adelantada el lado sobre el que galopa justo y unido; también define esta voz el brazo y la pierna sobre los cuales trabaja y que adelantan más que los opuestos.

 José V. Ruiz de Eguílaz y Mondría
Coronel de Caballería